Canelones de Espinacas

Ya tocaba un post de receta, verdad? Y ya tocaba un post de receta italiana "con sabor a puchero", verdad? Pues aquí está: Canelones de Espinacas, con champiñones y "guanciale".

Ligerita no es y rápida...pues más o menos, no quiero engañaros. Pero rica....uhmmm...riquísima! Y una manera diferente de comer pasta durante la semana. Claro por todo el proceso yo os recomiendo, o bien hacerla en fases preparando el relleno el día anterior y dejar montaje y cocción para el momento de comer, o hacerla durante el fin de semana como fué mi caso. La familia itagnola en la cocina compartiendo un "aperitivo" mientras se prepara todo a fuego lento. Ahí vamos.. 

Ingredientes:

• 8 canelones
• 500 grms de espinacas naturales
• 125 grms de guanciale ahumado (la panceta en España)
• 100 grms de champiñones laminados
• 1/4 vaso de Vino blanco
• 4 cucharadas de Harina
• 1 cucharada de mantequilla
• 1/2 litro de leche entera
• Nuez moscada, sal y pimienta
• Parmesano rallado

Empezamos con el relleno de los canelones. Para ello pones a hervir agua con sal y una vez que de el primer hervor añades las espinacas y las dejas cocer unos 8 min aproximadamente. Las que yo compré ya venían las hojas limpias, listas para poner a hervir.

Mientras tanto en una sartén hemos puesto unas gotas de aceite de oliva, el guanciale o panceta ahumada cortada a daditos y los champiñones laminados. Soltará mucha agua por los champiñones así que os recomiendo hacerlo a fuego lento y con paciencia hasta que el agua se consuma.

Cuando estén listos, apróximadamente en unos 10 minutos, le agregamos un "chorreón" generoso de vino blanco, sal y un poco de pimienta, y dejamos reducir unos minutos para que se mezclen bien los sabores.

Cuando las espinacas estén cocidas, las escurrimos bien en un colador de pasta y la picamos finamente. Un vez lista se la añadimos al guanciale y a los champiñones y mezclamos bien.

Nota: Ésta es la parte que en mi opinión podéis hacer el día anterior si queréis ir más rápido. Basta con ponerlo en un bol y a la nevera tapado con papel film!!

El mismo día que se vayan a comer se sigue con la preparación. Pasamos a la salsa bechamel. En una cacerola ponemos 1 cucharada de mantequilla, cuando esté derretida agregamos la harina y movemos rápidamente para mezclar bien. Poco a poco incorporamos la leche (que debe estar templada) sin dejar de mover con unas varillas, así conseguiremos que no nos salgan grumos. Peeeero....si os salen grumos como me pasó a mi que no cunda el pánico!! Yo la dejé enfriar un poco y la metí en la batidora. Dos pasaditas a máxima potencia y adiós grumos! ;-)

Vuelta a la cacerola y agregamos la nuez moscada y la sal. Sabremos que nuestra bechamel está lista cuando no esté ni muy líquida ni demasiado espesa. Tened en cuenta que nos servirá para hacer la crema del relleno y para gratinar en el horno.

Nota2: Ojo con la nuez moscada y no pongáis más que la punta de una cucharadita de las de café. Si ponéis demasiada corremos el riesgo de que después el relleno sólo sepa a nuez moscada, y no queremos eso. ;-)

A continuación añadimos un poco de esta bechamel a las espinacas con los champiñones y el guanciale que ya teníamos preparado y hacemos una crema con la que rellenaremos nuestros canelones.

En España yo siempre he visto las placas de canelones que se precocian en agua y después se rellenan haciendo un canutillo. Pues bien, llego al super aquí en México y me encuentro con unos canutillos ya cerrados de pasta dura que sólo hay que rellenar, nada de cocer. La parte itagnola de la familia (que esta vez fue además mi pinche) me dijo que en Italia los canelones son así, que lo de las placas es un "invento nuestro"...pues puede ser. Por si sí o por si no, compramos una marca made in Italy como no podía ser de otra manera.
Hecha la pasta, untamos un fuente de horno con mantequilla y empezamos a rellenar los canelones ayudados por una cuchara pequeña y un cuchillo, y vamos colocando en la bandeja.

Cuando estén listos cubrimos con el resto de bechamel que preparamos, espolvoreamos con abundante queso Parmesano rallado y al horno (que previamente hemos precalentado a 180 grados por 15 min). El tiempo de cocción en el horno será el que te indique la caja de los canelones. En nuestro caso eran 20 min.

Y listo!!! Un festín gastronómico de fin de semana...los pequeños placeres de la vida que te hacen más feliz. 

Espero que os animéis y ya me contáis qué tal os salieron.